En los últimos años, numerosos científicos han reconocido las increíbles propiedades del agua alcalina ionizada, sobre todo desde que los contaminantes del agua del grifo han ocupado el centro del debate público.
Mucha gente piensa que beber agua filtrada, agua mineralizada o simplemente añadir bicarbonato sódico al agua embotellada puede ayudar al organismo a mantener el equilibrio ácido-base correcto.
Nada más erróneo.
Por mucho éxito que tengan estos métodos a la hora de mejorar la calidad del agua, el agua resultante ni siquiera es comparable en beneficios al agua ionizada y energizada.
Por ejemplo, el agua alcalina embotellada que se encuentra en las tiendas pierde la mayor parte de su poder antioxidante en pocos días, tiempo insuficiente para cubrir todas las etapas de la venta (embotellado, distribución y almacenamiento).
Además, ni siquiera la adición de sustancias alcalinizantes (como el bicarbonato sódico) modifica fundamentalmente el agua de partida.
De hecho, la estructura del agua sigue siendo esencialmente la misma.
La clave para mejorar la calidad del agua es la energización y la electrólisis: los procesos que tienen lugar dentro del ionizador de agua
Ionizador de agua vs purificador de ósmosis inversa
Un ionizador de agua es un instrumento que no tiene nada que ver con un simple purificador de agua.
Aunque los destiladores y los filtros de ósmosis inversa se han convertido en una herramienta muy popular en los últimos años, estos sistemas no son una solución válida y segura.
De hecho, aunque eliminan muchos contaminantes, tienden a proporcionar un agua muerta, ácida y carente de minerales.
Justo lo contrario del agua viva y alcalina que tanto nos gustaría obtener.
Por eso, la solución más eficaz para mejorar realmente la calidad del agua doméstica es la electrólisis, combinada con la energización.
El principio es sencillo: el agua, tras pasar por un doble filtro, se separa en hidrógeno y oxígeno.
Esto se consigue mediante la acción de electrodos de titanio y platino en una cámara especial (cámara de electrólisis), que estructuran el agua dividiéndola en alcalina y ácida.
Mientras que los electrodos negativos atraen a su cámara los minerales cargados positivamente (alcalinos), los positivos atraen a los cargados negativamente (ácidos).
Finalmente, las dos cámaras están separadas por una membrana con agujeros muy pequeños, que deja pasar las moléculas más grandes (minerales) y retiene las más pequeñas (racimos).
El resultado es un agua alcalina, neutra y ácida que puede utilizarse según las necesidades.
Alcalina, neutra o ácida: ¿qué agua utilizar?
El agua fuertemente alcalina (pH 10 - 10,5) sirve para
- Hidratarse profundamente durante la actividad física o durante el verano.
- Cocinar todo tipo de alimentos: por un lado potencia los sabores y permite utilizar menos condimentos y sal, por otro disminuye el tiempo de cocción, reduciendo la factura de la luz.
- Escaldar verduras como las espinacas, la soja, las legumbres, el brécol y otras verduras de hoja verde para obtener el máximo poder antioxidante y conservar su color verde brillante.
- Lavar las frutas y verduras: esto permite que se escapen muchos contaminantes, como ciertos pesticidas (incluso los alimentos ecológicos pueden estar contaminados por los contaminantes transportados por el aire) a los que están sometidos, por lo que un lavado rápido con agua fuertemente alcalina es suficiente para higienizarlos a fondo).
- Desinfectar y desintoxicar la carne y el pescado: la carne y el pescado que se comercializan hoy en día, llenos de hormonas, metales pesados y antibióticos, necesitan ser desintoxicados.
Para ello, es necesario combinar agua fuertemente ácida con agua fuertemente alcalina: antes de cocinarlos, sumérjalos primero durante 10 minutos en agua fuertemente ácida y, a continuación, sumérjalos durante el mismo tiempo en agua fuertemente alcalina.
- limpiar superficies: elimina las manchas de aceite y grasa de todas las superficies e incluso de la ropa.
- lavar la vajilla: permite utilizar menos detergente al lavar la vajilla a mano y ahorra agua, ya que sólo se necesita un tercio o un cuarto de la cantidad normal de agua para lavar y aclarar.
- preparar té, café e infusiones.
- preparar un jabón natural combinando agua fuertemente alcalina con nueces de jabón y un aceite esencial 100% puro, como el de lavanda.
Para hacer un jabón blanqueador totalmente natural, basta con triturar las nueces de jabón, escaldarlas en agua fuertemente alcalina y dejarlas reposar en ella toda la noche.
A continuación, licúe la mezcla y déjela reposar un par de horas, removiendo de vez en cuando.
Cuela el líquido resultante y añade tu aceite esencial favorito.
Utiliza una taza por cada carga de lavadora.
- Tonifica las piernas y elimina la celulitis vendándolas con toallas empapadas en agua fuertemente alcalina.
Mantén el vendaje puesto durante al menos 40 minutos, después lávate con agua ácida (pH 5,5) y deja que las piernas se sequen al sol.
El agua alcalina (pH 9-9,5) se recomienda para:
- dar de beber a las mascotas (mejora su salud, su nivel de energía y el olor de su cuerpo, heces y orina es menos intenso)
- aliviar la migraña: la acidosis es una de las causas más frecuentes de dolor de cabeza y beber agua alcalina a diario ayuda a aliviarlo, ya que equilibra la relación ácido-base.
- aumentar el rendimiento deportivo y sexual: el agua alcalina aumenta la circulación sanguínea y la hidratación.
Estudios científicos han demostrado que beber agua alcalina antes de un entrenamiento reduce los niveles de ácido láctico en el cuerpo y hace que haya más oxígeno disponible en la sangre (60%).
- aliviar los síntomas intestinales como la hiperacidez, la indigestión y la diarrea crónica.
- limpiar el organismo de toxinas y metales pesados.
El agua ligeramente alcalina (pH 8,5 - 9) se recomienda para:
- Las personas con estómago sensible o que nunca hayan bebido agua alcalina (se recomienda un ciclo de varias semanas).
- Regar flores, plantas caducas y basófilas (perejil, aceitunas, zanahorias, romero, etc.).
- Realzar el sabor de los caldos: al preparar sopas y guisos, el agua ligeramente alcalina realza el sabor del caldo.
- Aligerar los licores y la cerveza sin perder su sabor: añada 150 ml de agua ligeramente alcalina por cada litro de licores para aligerarlos sin alterar su sabor.
- Cocine cereales integrales y pasta integral: tardarán menos en cocinarse y los oligoelementos y minerales estarán más biodisponibles y serán más saludables.
Agua purificada
Se recomienda agua neutra purificada (pH 7.5) para
- dar de beber a los niños (hasta los 3 años).
- para preparar papillas y alimentos infantiles homogeneizados o para disolver leche en polvo en caso de suplementación en bebés.
- para tomar drogas y medicamentos sin alterar sus efectos.
- remojar los brotes en una germinadora automática acorta el tiempo de germinación y evita la aparición de moho.
- dar agua a las crías.
- Regar plantas neutrófilas como la granada, el haya, el mirto, los pepinos, los crisantemos, los guisantes, las habas, los espárragos, el brécol, las patatas, las alcachofas, los tomates y los pimientos.
Agua ácida
El agua ligeramente ácida (pH 6,5 - 6) se recomienda para:
- crear agua de rosas: una loción con propiedades tonificantes y astringentes que se utiliza para que la piel esté nutrida y radiante.
Para crear el agua de rosas, recoge pétalos de rosa sin tratar químicamente y colócalos en un recipiente de cristal, cúbrelos con agua agria y déjalos macerar toda la noche.
A la mañana siguiente, cuélalo todo y vierte el líquido resultante en un pulverizador de cristal oscuro.
- cepillarse los dientes y cuidar la salud bucal.
- enjuagar el cuerpo después de la ducha.
- cuidar la belleza de la piel y el cabello (champú y acondicionador).
Para preparar un champú natural sin utilizar productos químicos, equípate con jabón de castilla líquido, una mezcla de hierbas aromáticas, una cucharada de aceite de almendras o avellanas, preferiblemente extraído en frío y unas gotas de aceite esencial de lavanda.
Vierte las hierbas en un recipiente de cristal, cúbrelo con agua ligeramente ácida y déjalo en remojo toda la noche.
A la mañana siguiente, cuélelo todo y añada el jabón, el aceite de almendras o de nueces y unas gotas de aceite esencial.
Guárdalo todo en una botella para utilizarlo cuando lo necesites.
- lavar animales de pelo suave.
- regar las plantas de color verde intenso y la mayoría de las bayas.
- dar brillo y lustre sin halos a objetos y superficies que no sean de cristal.
El agua ácida (pH 5,5) se recomienda para:
- tratar la caspa del cuero cabelludo.
- aliviar las quemaduras solares y leves.
- limpiar el rostro de impurezas, reduciendo el acné.
- limpiar residuos difíciles de eliminar, como los de sartenes u ollas quemadas.
- limpiar el cristal sin dejar rayas.
- dar más brillo a la vajilla y la cubertería.
El agua fuertemente ácida (pH 3,5) se recomienda para:
- humedecer los brotes sembrados en una maceta de tierra
- esterilizar tablas de cortar y objetos de cocina de madera
- esterilizar las manos y desinfectar la piel en caso de heridas, dermatitis, úlceras, picaduras de insectos, pie de atleta e infecciones fúngicas
- desatascar tuberías
- utilizarse como aftershave
- dificultar la formación de caries, ya que elimina por completo la proliferación bacteriana debida a los restos de alimentos.
- aliviar los dolores de garganta: bastan 3 gárgaras al día para obtener increíbles beneficios.
- crear un pesticida natural eficaz e inocuo para desinfectar.
- eliminar el óxido de los metales.
- desinfectar a los animales de bacterias y parásitos.
Ionizador de agua LifeEnergy: fácil de instalar y utilizar
Ahora que conoce los múltiples usos del agua ionizada y energizada, quizá se pregunte cómo conseguirla.
El ionizador LifeEnergy Water puede ayudarle: fácil de instalar, sólo tiene que conectarlo al grifo de su casa y en cuestión de segundos dispondrá de agua alcalina, neutra o ácida para cualquier eventualidad.
Atención: en cualquier ionizador sólo se puede obtener agua ácida si el agua de partida tiene un valor de pH tendente a ácido.
En la gran pantalla táctil sólo tiene que seleccionar el grado de alcalinidad, neutralidad o acidez del agua e inmediatamente se dispensará.
Tanto en el agua ácida como en la alcalina, se pueden seleccionar 5 niveles simplemente tocando el número correspondiente al nivel deseado.
Atención: ¡en cualquier ionizador de agua, sólo se puede obtener agua ácida si hay ciertas sales ácidas en el agua de partida!
Para cada nivel se indicará el pH, el ORP, el hidrógeno disuelto, el caudal por minuto y la duración de los dos filtros.
